viernes, 19 de diciembre de 2008

Protocolo Contexto social de los 70

PROTOCOLO

CONTEXTO SOCIAL DE LOS 70

Texto Margarita Quezada Venegas. En perspectivas metodológicas en Trabajo social.

Protocolo elaborado por:

Gloria Mercedes Carrillo Cabanzo

Lugar y Fecha:

Salón del CEIR - Mayo 22 de 2008

Asistentes

William García Coordinador seminario

José Manuel Pérez Director Programa y relator

Docentes:

Oliverio Gómez, Sandra Varón, María Leonor Morales, Adrian Bonilla, Guillermo Chica, Oscar Quintero, Gloria Yolanda Espitia, Liliana Betancuort, Diego Echeverry, Martha Jenith Turriago, Ana María Pérez, Álvaro Fernández, Néstor Giraldo, Nidia Patricia Ocampo y Gloria Mercedes Carrillo.

Orden del día

1. Lectura y comentarios al protocolo sobre fenomenología

2. Lectura y comentarios al protocolo sobre el funcionalismo

3. Relatoría contexto social de los 70

4. Debate

Desarrollo del orden día

1. Lectura y comentarios al protocolo sobre la matriz fenomenológica

El coordinador del seminario profesor William García realiza la lectura del protocolo sobre la matriz fenomenológica (anexo N° 1), con relación a éste protocolo se realizan los siguientes comentarios:

Profesor William García

Desataca la importancia de unificar los elementos de presentación de los protocolos, en la medida que éstos al igual que las relatorías se constituyen en la memoria escrita del Seminario.

Con respecto al protocolo en mención plantea que “el documento tiene los elementos claves de lo que podría ser la introducción a la fenomenología, pero no tiene elementos analíticos, de igual forma se mencionan autores que le aportan a la matriz pero no se desarrollan”. Los nombres que deben aparecer en la presentación y firma del protocolo son los de los protocolantes y no los de los relatores.

Adicionalmente plantea la importancia de tener en cuenta que la elaboración del protocolo es un esfuerzo importante al tratar de poner en el papel una discusión que fue compleja, por tal razón cuando se trate de protocolos con matrices tan complejas como la fenomenología, la responsabilidad de su construcción es compartida por los demás profesores con el fin de definir ideas claras sobre el tema tratado.

Profesor Diego Echeverry:

Plantea la dificultad de recordar lo mencionado en éste seminario debido al tiempo que ha transcurrido desde su realización, sin embargo considera que en el protocolo faltó ampliar el tema tratado a cerca de la importancia de revisar si desde la formación en el área de investigación se están aportando a los estudiantes los elementos suficientes para reconocer ésta forma de ver la realidad y abordar desde sus prácticas estudios de corte fenomenológico.

Profesor Oliverio Gómez

Destaca el último párrafo del protocolo en el sentido que menciona que debemos seguir explorando el tema y profundizando en él, argumenta su afirmación en dos razones:

La primera en relación con una situación concreta sucedida con estudiantes de semestres superiores de Trabajo Social a los cuales se les mencionó el tema y no lo reconocieron, destaca básicamente la importancia del análisis de éstos elementos en la formación de los trabajadores sociales en la Universidad del Quindío.

En segundo lugar plantea que los saberes sociales en general se encuentran en un proceso de replanteamiento de su historia, menciona con relación a la fenomenología y la hermenéutica, que según el maestro Daniel Herrera, “El ser humano no es una cosa entre las cosas del mundo, sino que el ser humano es el sujeto del mundo y que el mundo mismo adquiere sentido en tanto hay un ser que le da sentido”, por tanto para trabajo social es básico ampliar y hacerse a las herramientas que involucran el pensamiento fenomenológico y hermenéutico.

Igualmente menciona, Heidegger planteó “los seres humanos somos seres de interpretación y por tanto de sentido, aquí se está jugando una manera de entender nuestra relación entre el mundo social con el natural”.

Finalmente el Profesor Oliverio argumenta que la relación entre el mundo de la ciencia y el mundo de la vida, nos sugiere mucho a propósito del trabajo social, “porque nos ayuda a quienes estamos haciendo conceptos a entender que también los reconstruimos y resignificamos con la gente y que claro la gente misma también puede repensar su manera de vivir en ese mundo de la vida a partir de los aportes desde los que trabajamos conceptos”, en conclusión destaca que en la discusión sobre la fenomenología surgen unos elementos importantes para la profesión e invita a seguir estudiándolo incluso con la participación de algunos especialistas sobre el tema.

2. Lectura y comentarios al protocolo sobre el funcionalismo

La docente Liliana Betancourt inicia la lectura del protocolo aclarando que el texto a leer es un documento borrador, debido a las dificultades presentadas con la grabación durante esta relatoría, de igual forma expresa que continúa a la espera de los aportes de los profesores sobre la discusión realizada éste día a cerca del funcionalismo.

Comentarios a cerca del protocolo sobre funcionalismo:

Martha Jenith Turriago

Inicia su intervención recociendo la complejidad de recoger toda la discusión, plantea que el documento presentado se queda en la primera parte del desarrollo del seminario y que básicamente faltó lo más importante que fue la discusión del equipo, así como los aportes del profesor Oliverio como corelator, quien con sus intervenciones contribuye en las aclaraciones sobre la matriz y finalmente las conclusiones con relación al trabajo social.

Ana María Pérez

En términos de la presentación del documento, propone darle otro orden para facilitar su compresión, con relación a cómo se dio la discusión y la presentación del tema en sí, menciona de igual forma la necesidad de recuperar la correlatoría y los aportes de la discusión y tratar de sintetizar ya que lo que se presenta en el protocolo es básicamente lo que se presentó en la relatoría.

Liliana Betancourt

Expresa que la discusión sobre los correlatores se encuentra en la mirada a la matriz fenomenológica en la visión en perspectiva.

Oscar Quintero

Recuerda la inquietud que surgió a partir del protocolo elaborado por la profesora Luz Offir Restrepo, sobre cómo organizar la presentación del protocolo, destaca la importancia de retomar en la presentación del documento la mención de quienes hacen los comentarios y planteamientos de cada profesor para evitar caer en interpretaciones por parte del protocolante, finalmente plantea que en el protocolo debe quedar registrado de manera textual lo que se dice con respecto al tema.

Néstor Giraldo

Plantea su inquietud en términos de la sensación que queda, “al parecer es lo mismo el texto de la relatoría y el protocolo”, es decir se pierde esa diferencia entre relatoría y protocolo.

José Manuel Pérez

Reafirma la dificultad para realizar el protocolo sin el registro de audio, especialmente en temas tan complejos sobre los cuales no todos somos expertos.

De igual forma destaca la importancia del seminario para los profesores quienes podemos darnos cuenta a partir de él, lo que se espera de nosotros en las asignaturas, menciona ésta como una de las razones de incluir asignaturas como sociología II desde el Consejo Curricular, a fin de ver las corrientes sociológicas contemporáneas en su vinculación con el trabajo social.

De otro lado resalta la inquietud planteada por el profesor Néstor en términos de la diferenciación entre texto, relatoría y protocolo, propone la dedicación de tiempo a la discusión práctica entre éstos elementos, a partir de experiencias de protocolos como los de la ESAP.

Gloria Yolanda Espitia

En relación a los elementos de construcción del protocolo destaca la importancia de estructurar los protocolos con las respectivas citas de los autores y adicionalmente los aportes de cada profesor, con el fin de que estos documentos se conviertan a futuro en textos de consulta por parte de estudiantes y otros docentes, es éste orden de ideas es necesario estructurarlos y darles la fundamentación con la referencia bibliográfica que sustente las citas que se hacen.

En conclusión, es notorio el interés de todos los docentes participantes del seminario en la discusión, análisis y definición de criterios generales para la presentación de las relatorías y los protocolos, conscientes de la importancia para la construcción de las memorias del seminario y aportes al Programa de Trabajo social de la Universidad del Quindío.

3. Relatoría “El contexto social de los 70”

El relator José Manuel Pérez inicia su planteamiento a cerca del documento objeto de revisión Contexto social del 70, mencionando que éste logra el objetivo que se propuso en términos que plantea lo que sucedió al interior del trabajo social en el período de referencia.

Por lo tanto aclara que lo que hará como relator fundamentalmente es ampliar lo relacionado con el contexto que la autora reduce en exceso, destaca la importancia del período histórico como uno de los momentos más brillantes en el aspecto intelectual y político en América latina.

Su presentación parte de una mirada general a lo que estaba pasando en el mundo en ese momento y que influyó en América latina, luego menciona la serie de acontecimientos que también sucedían aquí desde el plano intelectual, pasando por la mención de temas más conocidos por todos nosotros como la IAP y finaliza con algunos temas relacionados con lo que se discutía en la época y una precisión con lo que significa todo el ámbito de la reconceptualización.

Contexto mundial

Para hablar del contexto de los años 60 y 70 y su respectivo impacto o influencia en el trabajo social se hace necesario ampliar el marco de análisis en términos de ir más allá de las fronteras de Latinoamérica, ya que en términos del Profesor José Manuel Pérez en su relatoría “nosotros no nos explicamos por sí mismos, por el contrario a partir del siglo XV, nos explicamos en relación a lo que ocurre en los países desarrollados”, es así como muchos de dichos fenómenos sociales, económicos, políticos, entre otros estaban influenciados también por el escenario mundial, en especial lo que sucedió en el siglo XX y desde la finalización de la segunda guerra mundial en el año 1945.

En ésta mirada del escenario mundial nos presenta lo que podríamos mencionar como hitos históricos en la medida que se convierten en punto de referencia, hecho clave y fundamental dentro de un ámbito o contexto, que nos permiten comprender la situación social, política, económica en general que caracterizó la época, como marco de análisis para el trabajo social y la influencia en el mismo.

Estos hitos históricos son básicamente cuatro, en primer lugar la división geopolítica del mundo en dos sistemas socioeconómicos, el capitalismo y socialismo y su influencia en el trabajo social y en otras dinámicas sociales de Latinoamérica; división de especial importancia porque mostró opciones diferentes de construcción de una sociedad distinta o alternativa al capitalismo. El socialismo abrió muchas posibilidades a nivel mundial para pensar en formas de organización social distintas.

En segundo lugar destaca el surgimiento de dos movimientos importantes a nivel mundial por un lado la crisis y caída del sistema colonial (imperialismo), con el ingreso al escenario mundial de una serie de países con unas formas de organización social y de lecturas del mundo que no se conocían y que adquieren una validez mayor, lo cual es de gran importancia para el trabajo social por el interés particular de la profesión en como pensar y repensarnos para intentar buscar construcciones sociales distintas a la sociedad de mercado.

El otro momento es el surgimiento del movimiento de los No Alineados, es importante porque una serie de países recientemente liberados o de construcción nacional reciente empiezan a pensar que debe existir una tercera posibilidad distinta al socialismo y al capitalismo, éste es el principal aporte de los No alineados desde el punto de vista histórico, afirma el relator, lo cual en el horizonte intelectual latinoamericano aporta en la reflexión en porque no buscar otras formas de organización social.

En tercer lugar se menciona el período conocido como la “Edad de Oro” del capitalismo, que es la época del máximo desarrollo económico junto con la de finales del siglo XIX, después de la segunda guerra mundial las fuerzas productivas tienen un gran desarrollo e inciden en que los intelectuales del sistema capitalista revivan la propuesta capitalista como la mejor opción de construcción y de organización social, planteando que el capitalismo podía resolver los conflictos que aparecieran sin grandes estremecimientos, sin necesidad de revoluciones y se plantea entonces la Teoría del Desarrollo. También es importante porque en los llamados países del tercer mundo el crecimiento de la economía va a producir transformaciones sociales, económicas y políticas, que van a incidir de manera definitiva en el desempeño de los profesionales de trabajo social.

Finalmente y en cuarto lugar el relator plantea la importancia de los aportes de las ciencias sociales como la filosofía, la sociología y sobre todo la antropología, que van a hacer lecturas distintas de lo que está pasando en el mundo, van a aplicar una serie de métodos y técnicas de trabajo con los pueblos que analizaban, que estudiaban, que finalmente van a aumentar el arsenal técnico e instrumental de los trabajadores sociales.

América latina

América Latina se destaca como el continente que más expresa las contradicciones que vive el mundo en ese momento, por lo que fue llamado en Europa el “continente en llamas” ya que desde el río Grande hacia el sur hasta la Patagonia se presentaban problemas y conflictos en todas partes, no sólo de orden político, sino que “ardía” América latina por el desarrollo de la economía y por las trasformaciones sociales y demográficas que trajo ese desarrollo económico, como son los cambios en la proporción de la población urbana rural, generando problemáticas sociales que son objeto de intervención por parte de los profesionales en trabajo social.

Adicionalmente con la Revolución Cubana los intelectuales ven a Cuba como la estrella polar a seguir, lo cual también influye en las posiciones políticas y teórico-prácticas de los trabajadores sociales.

Cuando se desarrolla el capitalismo en Europa hay una explosión intelectual sin precendentes se desarrolla todo, la literatura, la cultura, el teatro, las artes, las ciencias, la literatura y en América latina va a pasar lo mismo, pero lo más importante es que los latinoamericanos comenzamos a repensarnos en lo que es “ser latinoamericano”.

En el plano económico, se destacan tres teorías influyentes como son la Teoría de las Etapas, en la que el subdesarrollo es considerado como una etapa por la cual todos los países del mundo deben pasar para llegar al tan anhelado desarrollo. La Teoría Cepalina, surge del interés de intelectuales en su afán por conocer América latina, por hacer propuestas que nos permitan llegar al desarrollo a partir de la realidad que vive América latina. Y la teoría de la dependencia, con dos corrientes claramente definidas una teoría de la dependencia propiamente dicha planteada por Enzo Faletto y otros y la teoría del desarrollo subdesarrollo con aportes de André Gunder Frank.

Esta efervescencia revolucionaria de la época alcanzó también a la iglesia, que después de la segunda guerra mundial, comienza un período democrático liderado por Juan XXIII y Pablo VI, se desarrolla la famosa Teología de la Liberación fundamentada en las conclusiones del Concilio Vaticano II, propone la opción por los pobres, los oprimidos, en contra de la sociedad de mercado propone una sociedad de entrega, de trabajo desinteresado, lo cual va a incidir mucho en el desempeño de los trabajadores sociales.

Por otra parte también aparece una educación para la liberación o educación liberadora propuesta por Paulo Freire y aparece también la filosofía de la liberación, con una gran cantidad de autores que están tratando de recuperar el pensamiento latinoamericano que desconocemos, éste pensamiento sometido empieza a cambiar desde los inicios del capitalismo y uno de los pensadores que va a intentar proponer una filosofía latinoamericana es Leopoldo Zea.

Finalmente se plantea la Ética de la liberación que va mas allá de la filosofía de la liberación por ser un propósito que supera la espacialidad Latinoamericana y trata de ser una propuesta para los oprimidos del mundo.

Influencia en el Trabajo Social

El recorrido por el panorama mundial y Latinoamericano que se vive durante los años 70 y la identificación de los hitos históricos facilitan una mayor compresión del movimiento reconceptualizador y su influencia en el Trabajo Social.

La reconceptualización que en su desarrollo ha estado caracterizada por diversas corrientes una de ellas como lo plantea el profesor Héctor Malagón de la Universidad Nacional identifica reconceptualización con el marxismo en el trabajo social, tanto desde el punto de vista teórico como desde el punto de vista práctico y cita “en América latina se le descargó al trabajo social las enormes, complejas y peligrosas tareas de las organizaciones políticas”, se plantea que el movimiento reconceptualizador precisamente por el movimiento revolucionario de la época lo ocuparon los marxistas, pero también había desarrollistas, había cristianos y demócratas cristianos.

El relator concluye que la reconceptualización es un movimiento más amplio y menciona el planteamiento de un contemporáneo, Herman Kruse que dice que “la reconceptualización no es un bloque monolítico de ideas y posiciones sino todo lo contrario es una olla hirviente en la cual bullen tendencias y corrientes no siempre factibles de conciliar entre sí, es en síntesis un movimiento”, lo cual fortalece la afirmación que no es tan sencillo aceptar que la reconceptualización va hasta los años 90, por el contrario hay una gran cantidad de tendencias que se mantienen y que tienen plena vigencia en la actualidad.

Destaca siguiendo a Kruse como temas generadores o problemas centrales del movimiento reconceptualizador:

En primer lugar el problema del subdesarrollo, según la teoría o corriente que adoptara el trabajador social, así mismo era su desempeño, todo trabajador social tiene que trabajar los aspectos educativos “pero una cosa es trabajar con un campesino para cooptarlo al sistema y otra un educador popular que va a movilizar”.

Otro aspecto importante es la aspiración a construir una teoría propia del trabajo social, que como hemos visto sigue manteniéndose hoy en día, ésta es una demostración de la reconceptualización no ha terminado, esta discusión sobre la teoría guía le da al trabajo social un estatus mucho mas académico.

La discusión ideológica se mantiene hoy en día, lo que pasa es que la mayor parte de los marxistas apabullados por la presión han tratado de esconderse y por lo tanto no hay discusión abierta.

En el tema relacionado con el cientificismo y la discusión interna en trabajo social por convertirse en disciplina y los últimos planteamientos en términos de decir que es una “profesión disciplina”, continua ese interés por adquirir el estatus de ciencia.

La diversidad metodológica es uno de los grandes aportes de la reconceptualización porque en ese ir al pueblo todo el mundo está probando muevas metodologías, sin someterse a una única técnica o método y surgen técnicas en todos los países, finalmente el trabajador social es quién se beneficia porque va a enriquecer todas las técnicas.

Por último, el compromiso existencial influenciado por la antropología, el comportamiento del trabajador social debe estar acorde con las teorías, ir a la gente, vivir en la comunidad en la que trabaja, para poder captar de una manera más profunda la realidad de la comunidad como lo propone Ezequiel Ander Egg.

4. Debate

Profesor Oliverio

Plantea en el marco de la discusión sobre el contexto de los años 70, en el mundo y América Latina, la importancia de reconocer toda una historia que viene de la misma formación de América latina y que apunta a hacer autoconciencia de sí y para sí; en la historia hay varias propuestas en éste sentido y sustenta su argumento referenciando casos como el de Bolívar que ya está pensando en América latina, así como también la famosa generación del 900 desde los escritores como José Martí, hasta los intelectuales del siglo XIX y comienzos del XX, hay una historia detrás del momento que tiene una expresión particular en los años 70, que se podría denominar de un esfuerzo por la independencia intelectual de América latina, el profesor Oliverio destaca en conclusión que hay antecedentes muy importantes, es decir, no solo están presentes en los años 70 sino que hay una historia que hay que recordar y es muy valiosa.

Adicionalmente menciona, en los años 70 reaparece la gran preocupación por esa independencia intelectual, por eso es que Leopoldo Zea también llamaría esa “mayoría de edad para América latina”, también es importante recordar que es una época marcada por el “Mayo del 68” y en esa medida por lo que se conoció como el neomarxismo de la teoría crítica, lo cual también influye significativamente en América latina, ese replanteamiento del marxismo también está en la base de las ciencias sociales y humanas y así del trabajo social, recuerda además que allí hay también esfuerzos protomarxistas y marxistas por pensar América latina y si se quiere por hacer un marxismo latinoamericano, que se preocupe por estas realidades.

Plantea, a propósito de éste contexto y ésta preocupación aparecen las reflexiones epistemológicas para fundamentar la legitimidad de un ser en sí mismos, de un pensarnos como latinoamericanos, ser latinoamericanos, eso está presente y subyace en tendencias como la filosofía de la liberación, la teología de la liberación, porque se intenta romper el presupuesto eurocéntrico convertido en fundamento universal para el ejercicio epistemológico, hay un esfuerzo por decir en términos epistemológicos que hay legitimidad, posibilidad para la construcción de conceptos desde la particularidad, desde la experiencia propia, desde las realidades propias, contextos propios y aspiraciones propias, eso subyace y sigue estando en el centro de la discusión.

Cita un documento de su autoría presentado en el congreso latinoamericano en Bogotá en el que plantea la idea de que en América Latina antes de la revolución posmoderna ya se estaba planteando este tipo de polémicas sin esperar el discurso posmoderno, se planteaban sus propios retos de construirse a sí mismos, pensar en la propia posibilidad de ser y de pensar como latinoamericanos, finalmente plantea que la construcción de la identidad latino americana tiene todos estos elementos y que los años 70 fueron muy ricos en ésta.

Néstor Giraldo

Plantea una inquietud “es decir si vamos a pensar en cultivar una postura de la resistencia en los términos que plantea el relator parece ser que la posibilidad no es la vanguardia sino la retaguardia, porque lo que pone el texto del profesor en discusión es otra vez esa relación entre lo universal y lo particular, o dicho de otro modo cuando pensamos en esa relación entre un regionalismo sentimental o un regionalismo crítico, esas categorías quedan allí en la exposición, y lo veo así, pensar en una postura de la resistencia que genere identidad no estaría tanto en la vanguardia como en la retaguardia, como de pronto se preguntan algunos posmodernos como ser modernos pero teniendo la posibilidad de ir a las fuentes”.

Álvaro Fernández

Plantea, más que un debate y una polémica hay un conflicto abierto y brutal entre una tendencia intelectual y científica y una tendencia revolucionaria y subversiva.

Destaca el trabajo de “Paulo Freire y Fals Borda y de aquellos que sin renunciar al pensamiento riguroso y a la ciencia deciden desarticularse de la academia y hacer un ejercicio y reconstruir la ciencia desde un cambio de los parámetros metodológicos, en la medida en que eran acusados de reformistas, de integracionistas y finalmente eran acusados de imperialistas”.

El conflicto es todavía más meritorio en la medida en que a pesar de esa corriente marxista, eurocentrica, no universalista, ni identitaria, logran elaborar unas de las teorías de las más poderosas y más fuertes en el mundo entero, cuando aquí se discutía sobre la IAP y las limitaciones de la IAP y de la educación popular, plantea el profesor Álvaro “yo no he podido encontrar las limitaciones ni teóricas, ni criticas, ni metodológicas ni epistemológicas que tengan estas nuevas posturas en el mundo”.

Plantea además los extremos de la tendencia revolucionaria subversiva en términos de una renuncia absoluta a la academia y a la ciencia porque ya todo estaba dicho en el catecismo marxista, ese debate que hoy no se siente en su momento no solamente ardía como dice América latina, sino que en su momento los ardores eran tan furibundos que quien no estaba conmigo estaba contra mí, a pesar de esto se logro constituir en América latina y de América para el mundo un conglomerado que logro oxigenar y que finalmente se consolida en Cartagena en el congreso de la IAP.

Hoy tenemos un ambiente completamente distinto pues “hay una confusión entre lo que es trabajo participativo y la IAP, educación popular y simple educación, ya se perdieron las fronteras y ya no se entiende ni epistemológica ni políticamente las consecuencias de una y otra, pero con la característica que hoy no está marcado por las armas” y en esa medida el debate se puede adelantar más profundamente quizá con la misma pasión, pero sin la actitud negadora, por eso afirma el profesor Álvaro “es el momento clave en la medida en que se pregunta y se pone en el horizonte del trabajo social, calidad de vida y condiciones de vida desde donde?, ahí estaría la pregunta desde la fenomenología, desde donde? para quién? y bajo qué sistema? en la medida en que finalmente para mejorar la calidad de vida y las condiciones de vida inicialmente tendríamos que definir de que se trata, hay que hacerlo y finalmente termina redundando en el mejoramiento del sistema en general, Habermas dirá profundizar la democracia es permitir la sobrevivencia a más largo plazo y extender el horizonte de existencia del capitalismo”.

Oliverio Gómez

Sugiere usar para caracterizar el marxismo la categoría de Lucaks, nos recuerda que escribió sobre el marxismo y dice por qué soy ortodoxo?, defiende la categoría ortodoxa como una manera de ubicar la interpretación y la práctica del marxismo en esa época.

Finalmente propone analizar los planteamientos del profesor Rafael Gutiérrez Girardot que desecha el aporte conceptual de todas éstas tendencias.

William García, concluye

El seminario ha tenido dos períodos fundamentales primero se centró en discutir la historia, el origen, el objeto del trabajo social y luego atendiendo la sugerencia pero por la vía de la denominación del trabajo social, se miraron las grandes matrices que lo han influenciado.

La discusión sugiere para el futuro del seminario seleccionar un tipo temas que nos permitan empezar a reflexionar sobre el ser latinoamericano.

Plantea, estratégicamente ya va siendo tiempo que éste seminario se vaya especializando en una temática que le permita ir diferenciándose y ese camino podría ser estudiar más esa literatura que sustente el ser latinoamericano, que sería lo que le podría dar más identidad al Programa de Trabajo Social en la Universidad del Quindío.

Finalmente solicita los profesores que conocen del tema ir seleccionando una bibliografía jerarquizada en su respectivo orden para el primer semestre del 2009.

Conclusiones

Analizar el movimiento reconceptualizador del Trabajo social implica reconocer todo el contexto que lo enmarca y que va desde la realidad latinoamericana y mundial de los años 70 hasta la mirada histórica que nos muestra como en nuestra evolución hay unos elementos muy valiosos que han aportado en la construcción de el ser latinoamericanos.

El trabajo social a partir de éste movimiento reconceptualizador ha logrado unos avances importantes tanto a nivel teórico como práctico, dichos logros han permitido afianzar la construcción de la identidad del trabajo social de Latinoamérica y para el mundo, dicha identidad se construye en el continuo de la dinámica de la relación dialéctica que caracteriza la profesión.

La reconceptualización si bien tuvo como época de auge los años 70, no es un movimiento terminado por el contrario, las discusiones internas que se continúan dando al interior de la profesión en términos de su cientificidad, metodología, teoría, entre otras sustentan cada vez más la vigencia del movimiento reconceptualizador en el trabajo social.

El seminario ha ido encontrando en su desarrollo temas de interés específico que le permitirán de igual manera generar una identidad propia del Programa de Trabajo social en la Universidad del Quindío, éste seminario en particular sobre el contexto de los años 70, evidencia como tema generador EL SER LATINOAMERICANO, como una opción que permitirá a futuro contribuir en la construcción de dicha identidad.

Con respecto a la presentación de los protocolos es importante unificar y definir los criterios que desde el seminario se tendrán en cuenta para su construcción y presentación a fin de que se consoliden en documentos estructurados de referencia y estudio posterior, que dan cuenta del desarrollo específico del seminario de trabajo social y los temas objeto de análisis y discusión.

Finalmente y como aporte en la reflexión a cerca de la temática sobre el contexto social de los 70, referencio algunos documentos que nos permitirán ampliar el estudio a cerca del tema:

· Texto el trabajo social desde una mirada histórica centrada en la intervención, de Alfredo Juan Manuel Carballeda, capítulo IV “los años setenta y sus repercusiones. Una mirada desde la intervención del trabajo social. Editorial Espacio 2006.

· Texto trabajo social latinoamericano a 40 años de la reconceptualización. Compilación de Norberto Alayón. Texto que hace una revisión general del movimiento reconceptualizador desde los diferentes países y permite comprender la realidad particular de cada uno de ellos en el contexto de los años 70, adicionalmente plantea la vigencia del movimiento reconceptualizador. “Porque la Reconceptualización, entendida como reflexión y acción crítica no ha desaparecido”…

No hay comentarios:

Publicar un comentario