viernes, 19 de diciembre de 2008

relatoria Intervancion en crisis y centrado en la tarea

UNIVERSIDAD DEL QUINDIO

FACULTAD DE CIENCIAS HUMANAS Y BELLAS ARTES

PROGRAMA DE TRABAJO SOCIAL

SEMINARIO DE FUNDAMENTACION DEL TRABAJO SOCIAL

MODELO DE INTERVENCIÓN EN CRISIS Y EL DE CENTRADO EN LA TAREA

Relator: Gloria Mercedes Carrillo C.

Correlator: María Angélica Ibagué V.

Fecha: septiembre 2 de 2008

Presentación:

La relatoría sobre el modelo de intervención en crisis y el de centrado en la tarea, se desarrolla a partir de la revisión del texto de Referencia Teorías contemporáneas del Trabajo social de Malcom Payne, adicionalmente se amplían algunos elementos mencionados con el apoyo de el texto “Intervención en Crisis” de Karl A. Slaikeu y el Manual de autoformación – Intervención en crisis del ICBF y el texto “La familia el desafío de la diversidad” de Adelina Gimeno.

El texto de Malcom Payne plantea el Modelo de intervención en crisis y el de centrado en la tarea, a partir de la afirmación que ambos preconizan intervenciones breves, los cuales están estructurados de forma que las acciones se planean de antemano y se ajustan a una pauta determinada.

Entre el trabajador social y el usuario existe un contrato o forma de acuerdo explicito que especifica las circunstancias en la que los dos intervendrán. El autor aclara sin embargo que ninguno de los dos modelos está conectado a enfoques conductistas.

Al revisar el texto de referencia se observa que se usan los términos de Asistente social y trabajador social, así como los de usuario y cliente social, en la relatoría se mencionan igual de manera indistinta para no entrar en la discusión a cerca de dichos términos y ocuparnos más bien del desarrollo del modelo propuesto de intervención en crisis y el de centrado en la tarea.

Modelo de intervención en crisis

Las crisis y la manera de intervenir en ellas se han convertido en campo de saber y de acción obligado para personas que trabajan en las áreas sociales y de salud. La “Crisis” como noción o concepto, han entrado a formar parte del saber común no solo de los profesionales, sino también de las personas que acuden en su búsqueda. Generalmente, la idea y experiencia de crisis que se maneja es la de un evento súbito que rompe el fluir normal o al menos esperable de los de los eventos vitales. Este carácter de ruptura es lo que le confiere su sentido de “urgencia”, lo cual a su vez lleva a que su manejo suponga, en principio, rapidez, inmediatez, brevedad.

Crisis y categorías relacionadas

El termino crisis deriva de la raíz indoeuropea skribn- que significa cortar, separa, distinguir y que alude también a la idea de “cernir”, “colar” o “cribar”. Conceptos derivados de la raíz anterior son “discriminar”, en el sentido de separar unas cosas de otras. De aquí que una de las definiciones psicológicas de crisis insista en que después de ella, la persona sentirá que no volvió a ser la misma, sensación que puede ser vivida y objetivada luego, como algo positivo o negativo.

Históricamente el término chino de crisis (Weiji) ha sido entendido, en sentido positivo. El símbolo chino de la crisis indica peligro y oportunidad. (Wilhelm 1967)

La palabra inglesa se basa en el griego krinein que significa decidir. Las derivaciones de la palabra griega indican que la crisis es a la vez decisión, discernimiento, así como también un punto decisivo durante el que habrá un cambio para mejorar o empeorar. (Lidell y Scott 1968)

En otro sentido también la crisis es una prueba, un periodo o un conjunto de dificultades a las que ciertos sujetos deben ser sometidos para acceder a un estadio superior y diferente.

“La crisis debe entenderse como el evento o interno o externo que desencadena una serie de reacciones, algunas de las cuales expresan el daño recibido y otras la defensa frente al mismo, o ambas cosas a la vez”.

La reacción de individuos y grupos frente a la experiencia amenazante es inseparable de las nociones de miedo, angustia y ansiedad.

Angustia y Ansiedad

Desde el punto de vista clínico se puede decir que la ansiedad se expresa en gestos y movimientos sin un fin preciso que manifiestan el sufrimiento emocional del ser humano. En la angustia hay una tendencia a la inhibición motora, a la quietud tensa e inhibida. El ansioso esta sobresaltado y el angustiado sobrecogido.

La angustia y la ansiedad se parecen mucho al miedo, pero a diferencia de éste tienen una causa más interna que externa. Un elemento fundamental para la aparición de la angustia es el conocimiento de potenciales amenazas futuras que suelen ser posibles aunque su probabilidad sea baja, la angustia es también adaptativa, en la medida en que permite prevenir acontecimientos dañinos al predecir su ocurrencia.

También es claro que en la infancia se consolidan patrones reactivos de angustia y las defensas contra esta; defensas que suelen ser múltiples y que tienen grado de éxito y eficacia para controlarla. Por otra parte la experiencia de la ansiedad es universal, todos los seres humanos la sufren alguna vez, constituye un elemento esencial para el aprendizaje y es un componente importante de toda motivación.

A continuación se mencionan las algunas formas en que las personas suelen ser afectadas cuando han sido víctimas de una situación traumática o cuando una crisis evolutiva o cuando ambas al mismo tiempo se suman:

Trauma,

Un trauma habitualmente genera una crisis, pero no todas las crisis suponen la existencia de algo traumático (crisis evolutivas), intervenir en una crisis puede disminuir su gravedad y evitar o aminorar sus secuelas.

Trauma y Crisis

El acontecimiento traumático es responsable habitualmente de una crisis circunstancial, suele llevar implícita la noción de riesgo grave para la vida o la integridad física o de personas cercanas. Se podría decir que el trauma es asimilable a la noción de una crisis circunstancial máxima.

TIPOS DE CRISIS

Existen muchas clasificaciones de crisis pero son finalmente variaciones alrededor de los grupos fundamentales que pueden ser descritos cercanos a criterios tales como agente causal y su origen, interna o externa al ser humano.

Crisis de desarrollo o evolutivas

Se caracterizan por tener un origen interno y estar relacionadas con los cambios que se asocian a la maduración y el desarrollo

Son universales y previsibles

Surgen por factores biológicos y sociales

Ocurren en cada etapa de desarrollo. Hay intentos de demorar cambiar o castigar el cambio

La familia puede adaptarse al estado emocional de quien entra en una nueva etapa

Concepción o Esterilidad, Embarazo, parto nacimiento, Infancia y niñez temprana, Adolescencia, Crisis de la identidad sexual, Crisis de madurez, Envejecimiento, Muerte, cambios en los roles en especial aquellos que conllevan un descenso o una disminución de rango, ingresos o poder (jubilación).

Crisis circunstanciales o inesperadas

Por otro lado encontramos las llamadas crisis Circunstanciales las cuales, por definición, se originada cuando se producen una pérdida de la fuente de satisfacción de necesidades básicas, o cuando se presenta una amenaza de tales pérdidas. en este sentido, la deferencia entre crisis evolutivas y las circunstánciales radica en que las primeras harían parte del desarrollo esperable en la vida de las personas, mientras que las segundas se producirán por eventos inesperados frente a los cuales el ser humano no es preparado, es decir, seria de naturaleza azarosa e inesperada.

La tensión es obvia y surge de fuerzas ajenas a la familia

No es previsible, ni probable que vuelva a ocurrir

Pueden ocurrir en todo tipo de familias

En una familia funcional todos se unen para resolverla.

Violación, Incesto, Aborto, Suicidio, Enfermedad aguda o crónica, Alcoholismo y abuso de sustancias

Divorcio, Separación, Maltrato familiar, Promoción, traslado, perdidas laborales, Viudez, Desastres naturales, Violencia deliberad inducida por el ser humano, Choque Cultural, Secuestros Huidas.

Lo interesante de la clasificación anterior es lo esperable, predecible y controlable de una situación. Pese a que es indudable la necesidad de ciertas certezas y seguridades básicas en la vida. La vida human es por definición cambiante y azarosa , impredecible.

Cabe mencionar que algunos autores señalan que existen una respuesta general a la crisis, la cual se caracteriza por reacciones tales como la negación, el rechazo, la incredulidad, el dolor, la confusión, algunos cambios fisiológicos neurovegetativos, y el desbordamiento de la habilidad defensiva y de solución de problemas.

Crisis estructurales

Son concurrentes y poseen un detonante intrínseco aunque a menudo se haga una atribución externa respecto a las causas que lo producen.

La tensión surge a causa de fuerzas ocultas más que manifiestas

La crisis no es un esfuerzo para producir un cambio, es más difícil de tratar.

Violencia, fuga, divorcios reiterados alcoholismo, intento de suicidio.

Crisis de desvalimiento

Familias con personas disfuncionales o dependientes

Mantienen amarrada la familia con exigencias de demanda y atención

Cuando una familia se encuentra en esta situación tiene como primer objetivo clarificar el rol del cuidador del desvalido, así como tener en cuenta las necesidades del resto de miembros de la familia, pues estas no se anulan.

Antecedentes históricos de la intervención en crisis:

El origen de la intervención en crisis moderna se remonta a los trabajos de Eric Lindemann y colaboradores, siguiendo los hechos del incendio del centro nocturno Coconut Grove en Boston, el 28 de noviembre de 1942, que tuvo 493 víctimas, Lindemann realiza un informe clínico en el que plantea una ayuda a los sobrevivientes y familiares de las víctimas, acerca de los síntomas psicológicos de los sobrevivientes lo cual marco el inicio para la teorización sobre el proceso del duelo, para aceptar y resolver la perdida.

Lindemann propuso que el clero y los asistentes comunitarios podrían tener un papel importante en la ayuda de la gente desolada durante el proceso del duelo.

Caplan, formuló a partir de los principios planteados por Lindemann el significado de la crisis en la vida de los adultos psicopatológicos. Su teoría se formó en consecuencia a partir de la psicología del desarrollo de Erikson(1963), en la que el ser humano fue provisto para entender el crecimiento desarrollo a través de ocho etapas claves. El interés de Caplan fue en cómo la gente vencía las diversas transiciones desde una etapa a otra. Además identificó la importancia de los recursos personales y sociales al determinar, si el desarrollo de las crisis resultaría en mejoramiento o empeoramiento.

Influencias teóricas

Moos en (1976) identifica cuatro influencias teóricas de la crisis

Teoría de Charles Darwin sobre la evolución y adaptación de los animales a su ambiente. Este sugiere el desarrollo de la ecología humana cuya hipótesis característica, es que la comunidad humana tiene un mecanismo adaptativo esencial en hombres en relación con su medio.

Teoría psicológica, considerando la relación y el crecimiento humano completos. Las preguntas básicas conciernen a la motivación y el impulso: Que mantiene activa la gente y con que fin?

Freud destaco que la motivación es un intento por reducir la tensión, fundamentada en impulsos sexuales y agresivos.

Carl Rogers (1961) y Abram Maslow (1954) enfatizan que la realización y el crecimiento positivo del hombre se enfoca en ambos aspectos hacia la autorealización y necesidad de enriquecer las experiencias y ampliar sus horizontes. En uno de sus estudios identifica como esencial la habilidad para resolver problemas como característica de modos de vida.

Buhler (1962) la conducta humana es intencional y está constantemente dirigida hacia logros y propósitos estructurales, se contempla la crisis como el momento en que se bloquean los propósitos y se vuelven súbitamente inalcanzables.

Erikson (1963) las ocho etapas proveen un nuevo reto transición o crisis. La teoría de las etapas supone que en cada transición el desarrollo subsecuente fue “peligroso”.

Teoría de Holmes y Masuda (1973) proviene de datos empíricos sobre como los seres humanos abordan el estrés extremo de la vida (campos de concentración, muerte repentina y desastres). Demostraron la relación entre el estrés asociado a sucesos de la vida en la salud física y la enfermedad.

“Como los programas de intervención en crisis se desarrollaron en los años 1960 y 1970, surgió la literatura sobre intervención. En revistas de psiquiatría, psicología, enfermería y trabajo social, se publicaron numerosos informes de casos sobre como ayudar a individuos y familias en crisis”[1]. En esta se publicaron específicamente temas sobre la crisis y como intervenir en ellas.

Baldwin (1979) sugiere que el modelo intervención en crisis, en virtud de su carácter interdisciplinario fuerte, en ambas, teoría y práctica, puede ayudar a unificar su influencia entre los profesionales de la salud. Estas ideas son congruentes con el creciente interés de la interconexión del cuidado de la salud mental y física en el tratamiento completo de la persona.[2]

La intervención en crisis:

Es una acción clásica que consiste en interrumpir una serie de acontecimientos que provocan anomalías en el funcionamiento normal de las personas

Utiliza tareas prácticas para facilitar el reajuste de la gente, aunque un aspecto importante es su respuesta emocional a la crisis y los cambios a largo plazo en su capacidad para manejar los problemas cotidianos.

Posee una teoría sobre el origen de las dificultades de la vida

Dirige su atención a los orígenes del método de salud mental, pone énfasis en la prevención más que en el tratamiento.

Las personas se las arreglan mejor si anteriormente han tenido que enfrentar una crisis, aunque no tanto si los problemas de la misma no se han resuelto por completo.

En trabajo social puede considerarse la intervención en crisis como una técnica general para tratar los problemas sociales. La crisis es lo que motiva a lo CS a presentarse a un organismo social en busca de ayuda.

Puede ser visto que la formulación de la teoría de la crisis utilizada aquí, trata de variables intrapsíquicas y que no muchas de las descritas conciernen al contexto social dentro del que suceden las crisis.

La intervención en crisis Naomi Golan

El autor presenta los principales planteamientos de Golan sobre la teoría de Crisis:

· Toda persona grupo u organización atraviesa una o varias crisis a lo largo de su vida

· Los incidentes peligrosos son aquellos problemas o dificultades que desencadenan crisis

· Los incidentes peligrosos pueden ser previstos (adolescencia) o imprevistos (muerte, divorcio, desempleo)

· Existe un estado vulnerable cuando los incidentes peligrosos causan mella en la gente.

· El equilibrio es la capacidad de las personas para encajar lo que le sucede

· Cuando el equilibrio falla recurrimos a la forma usual de encarar los problemas si esto falla, recurrimos a otras opciones.

· La tensión y el estrés están presentes en cada fallo

· Un factor desencadenante asociado a problemas sin resolver aumenta la tensión y

· Causa un estado de trastorno llamado crisis activa

· Los factores desencadenantes pueden ser presentados al AS como el problema central del cliente

· Los hechos estresantes pueden apreciarse de tres formas distintas:

Hecho estresante

Respuesta

Amenazas

Ansiedad

Perdida

Depresión

Retos

Moderada ansiedad, expectativas, intentos de resolver el problema.

· Cuantos más problemas se hayan resuelto con éxito en el pasado mayor será el número de estrategias disponibles de solución de problemas

· Todas las crisis se resuelven en seis a ocho semanas

· Los sujetos en crisis están más abiertos a recibir ayuda, es decir la intervención en crisis es más efectiva que en cualquier otro momento.

· Aprender a superar las crisis mejora la capacidad de enfrentamiento ante la vida.

Pasos de la reintegración:

· Corrección de la percepción cognitiva: los CS consiguen una noción mas completa y exacta de los hechos que les afectan.

· Manejo de los sentimientos: dar rienda suelta a los sentimientos del CS.

· Desarrollo de nuevas conductas de enfrentamiento a problemas.

Rapaport (1970) presenta un enfoque de intervención en la crisis que es mas psicodinámico que el cognitivo enfoque de Golan.

Se centra en la exploración del historial de la crisis y de sus orígenes emocionales y define dos niveles de intervención:

En el primer nivel los asistentes sociales:

· Alivian síntomas

· Hacen volver a los clientes a los niveles anteriores de funcionamiento o hacen mejoras sobre ello

· Ayudan al CS a comprender las causas de las crisis

· Enseñan a la familia y a la comunidad a apoyar al CS

En el segundo nivel la intervención es más compleja

· Ayudan a los CS a comprender conexiones existentes entre las crisis actuales y las anteriores

· Plantean a los CS nuevas formas de pensamiento y de hacer frente a los problemas.

Sifneos (1967-1972) indica que aquellos CS que tiene escasa capacidad de reacción ante los problemas, pueden eliminar su ansiedad, si los AS utilizan con ellos técnicas que les infundan confianza en sí mismos y les brinden apoyo y ayuda práctica. Los CS mas fuertes también puden sentir ansiedad, si como parte de la ayuda se les hace ver los problemas y métodos para superarlos como un reto.

Golan piensa que las tareas son importantes en el tratamiento de la crisis pero no utiliza la tarea de la misma forma que la teoría de centrada en la tarea. Se le da la consideración de un papel emocional o socialmente necesario o de una serie de acciones en la vida del CS para conseguir la integración.

Golan sin embargo propone un proceso similar al de centrado en la tarea, el AS social proporciona apoyo y ayuda a través de este proceso:

· Explorar las diversas opciones

· Ayudar a seleccionar una solución

· Solicitar un servicio

· Acostumbrarse y adquirir pericia en la utilización del servicio.

Golan Hace distinción entre estos procesos instrumentales y el manejo de tareas psicosociales que consisten en:

· Hacer frente a los sentimientos de perdida y de amenaza a la propia seguridad y a la propia estima.

· Probar nuevos mecanismos para enfrentarse a la vida como un modo de controlar la ansiedad.

· Ofrecer apoyo durante el periodo de estrés buscando nuevos servicios.

· Hacer que el Cs se percate de lo que haya conseguido producto de la perdida.

Modelo de Golan para la intervención en crisis: considerando a las familias y a los grupos como escenarios idóneos para el tratamiento.

Fase inicial

Fase Media

Fase final

Formulación: 1ª entrevista

Implantación: entrevistas 1- 6

Terminación: entrevistas 7 y 8

Enfoque sobre el estado de crisis

Concentrar la atención en el aquí y el ahora.

Expresión de emociones de los CS

Explorar hechos peligrosos.

Descubrir el estado vulnerable

Evaluar las perturbaciones causadas por el estado de crisis.

Recolección de datos

Conseguir datos que falten

Comprobar incoherencias

Seleccionar principales temas:

Perdidas ansiedad, reto.

Decisión sobre la terminación

Definir elementos que permitan terminar la intervención de común acuerdo con el CS.

Evaluación

Planes decisorios

Estimación de circunstancias y de la prioridad de los problemas

Comprobar las prioridades del CS

Detectar el problema principal

Cambio en la conducta

Comprobar los mecanismos de enfrentamiento a la vida en el área problemática.

Metas realistas a corto plazo

Establecer tareas

Determinar las tareas prácticas.

Determinar las tareas pensantes.

Revisión de los progresos alcanzados

Resumir los progresos

Revisar los temas principales

Contrato

Definir metas tareas para el CS y el AS.

Plan futuro

Discutir los problemas actuales

Discutir los planes del CS

Ayudar al CS a aceptar que el proceso ha terminado

Ayudar al CS a sentirse bien ante la idea de Volver con otros problemas.

La teoría de la crisis dentro de una estructura general de sistemas puede resumirse como:

“Antes de un suceso de crisis, el individuo (persona-sistema), se encuentra estable, seguro, funcionando adecuadamente como un miembro de un grupo familiar/social que está alojado en un ambiente comunitario, que es parte de una amplia cultura social. El suceso precipitante (pérdida de un ser querido, desempleo) choca sobre la persona, familia, comunidad o sistema cultural.

Este interactua con la personalidad del individuo, un proceso medido en términos de cinco subsistemas: CASIC (conductual, afectivo, somático, interpersonal y cognoscitivo). La reacción del sujeto en cambio afecta los otros suprasistemas (familia, comunidad, etc) en el sentido mas inmediato, el conyugue, hijos y amigos cercanos se involucran íntimamente con la crisis. Sólo como probable, sin embargo, vecinos, compañeros de trabajo y la comunidad completa se afectan. A los pocos días siguientes al trastorno de crisis, las oportunidades para la primera ayuda psicológica (intervención en crisis de primer orden) de la familia y comunidad existente. En las semanas subsecuentes las etapas se dirigirán a restablecer el enfrentamiento y por último resolver la crisis. Sea a través de una terapia crisis formal (proporcionada por un trabajador entrenado mediante diversos sistemas comunitarios), o a través de recursos de ayuda naturales (familia, vecinos, medio), finalmente ocurrirá el equilibrio ya sea para la salud o enfermedad. La resolución de todas las crisis individuales tendrá un efecto considerable sobre la salud total de vecinos, comunidad y sociedad en general.”[3]

La teoría general de sistemas, nos permite pensar en la persona en crisis y también en la familia, comunidad y sistemas culturales como un fondo para cada situación particular.

El centrado en la tarea: rechaza cualquier base psicológica o sociológica en sus métodos.

Esta centrado sobre categorías definidas de problemas

Ambos tratan de mejorar la capacidad de la gente para enfrentar se a problemas de la vida

Hace hincapié en el desarrollo de tareas prácticas que resolverán problemas específicos. Los problemas emocionales se alivian mediante la realización exitosa de las tareas.

El trabajo centrado en la tarea se encarga de los problemas tal como llegan y trata de resolverlos pragmáticamente.

Trata un muestrario más extenso de problemas y le da importancia a la definición clara de problemas - objetivo a resolver de las tareas y de los límites de tiempo.

Trabajo casuista centrado en la tarea. Reid y Epstein,

Orígenes

El trabajo casuista centrado en la tarea pertenece a Reid (1978), Epstein (1978) ofrece una versión más práctica y accesible del mismo. Proviene de una investigación realizada por Reid y Shyne (1969), ha sido extensamente validado en el campo del trabajo de familia y de grupo.

“En el Trabajo centrado en la tarea los AS resuelven los problemas presentados por los clientes” concepción que ha evolucionado en la intervención desde trabajo social hoy no es el Trabajador social quien resuelve los problemas sino, los usuarios con el apoyo del Profesional quienes resuelven sus propios problemas, esta diferencia muestra la evolución de la intervención desde trabajo social.

Cualquier teoría del Trabajo social debería explicar como surgen los problemas, cuales son estos problemas y como hay que tratarlos.

Un aspecto esencial en este enfoque son los procesos breves con límites de tiempo ha demostrado ser más eficaz.

Ha sido aplicado expresamente en el trabajo de grupo y en el trabajo de familia.

En el trabajo centrado en la tarea los AS resuelven los problemas presentados por los CS. Cualquier teoría del trabajo social debería por tanto explicar como surgen los problemas, cuales son estos problemas y como hay que tratarlos.

El trabajo centrado en la tarea tiene que ver con problemas que:

· Los clientes sociales reconocen y aceptan

· Pueden ser resueltos mediante acciones que pueden ser realizadas sin la presencia de los AS

· Pueden ser definidos claramente

· Emanan de los deseos insatisfechos del cliente, en vez de estar definidos por extraños

· Proceden de extremos de la vida de los clientes que estos desean cambiar

Algunos problemas son compartidos por otras personas (familia – comunidad), y otros no por tener un criterio diferente al del CS, el AS debe primero abordar las diferencias de las otras para poder abordar los deseos del cliente y unificar la atención.

Reid (1978) Problemas para los que el trabajo centrado en la tarea es efectivo:

· Conflictos interpersonales

· Insatisfacciones con las relaciones sociales

· Problemas con organizaciones formales

· Dificultad en asumir papeles (roles)

· Problemas decisorios

· Estrés emocional reactivo

· Recursos inadecuados

· Otros

Los AS deben tratar de entender la conducta de los CS en lo que concierne a la solución de los problemas, buscando explicaciones sobre como se originan los problemas y de cómo resolverlos.

La dirección y la fuerza de los deseos de los clientes deben ser evaluados, los deseos desencadenan la acción, pero los sistemas de creencia de los CS perfilan estos deseos y los modos idóneos de satisfacerlos.

Las creencias guían la acción y son modificadas por las interacciones entre el AS, el CS y otras personas, en dichas creencias hay puntos de fuerza que pueden contribuir al cambio de las mismas de una forma muy parecida a lo que ocurre en las terapias cognitivas.

Puntos de fuerza:

Exactitud: AS ayudan a los CS a darse cuenta de lo precisan que son las creencias

Alcance: AS ayuda al CS a que se de cuenta del verdadero alcance de las implicaciones de sus creencias.

Coherencia: el AS ayuda a suprimir las distorsiones causadas por dos creencias.

Las emociones aparecen por la interacción entre las creencias y los deseos. El temor o la ansiedad aparece cuando el CS siente que un deseo se frustra.

La acción es una conducta intencionada.

Los planes son declaraciones de intenciones formados por la interacción de creencias deseos y emociones.

La planificación entraña la planificación de varias alternativas. Se operativizan en acciones. Cuando un plan se lleva a cabo, los resultados proporcionan una retroinformación.

Algunos clientes no tienen no tienen la habilidad para llevar a cabo las acciones que demanden una determinada circunstancia. Estas habilidades se pueden aprender de modo directo o ser extraídas de otras situaciones, avanzar en pequeños pasos puede favorecer el aprendizaje.

El ambiente que rodea al CS puede ser importante, ya que algunos sistemas sociales pueden generar generar creencias en los clientes, afectarlas o responder a las acciones proporcionando retroinformación que pueden afectar positiva o negativamente las acciones posteriores, que pueden convertirse en secuencias interactivas de forma que las acciones se influyan una a otras en círculos o espirales. Esta idea es tonada de la teoría de la comunicación

Las organizaciones pueden configurar un contexto para las acciones en donde se etiqueten o clasifiquen a las personas o se generen creencias colectivas a cerca de cierta gente.

Fines de la estrategia de intervención:

· Ayudar a los CS a solucionar los problemas que les afectan

· Proporcionar una buena experiencia en la solución de problemas, de modo que los CS mejoren su capacidad para hacer frente a dificultades y estén más dispuestos a aceptar ayuda.

El AS junto con el CS identifica los problemas a solucionar, lleva a cabo las tareas, y ensaya y revisa logros.

Mediante este enunciado de principios generales es evidente que las ideas del modelo proceden de varias fuentes psicológicas y sociológicas. La teoría del aprendizaje social parece que influye en el modo de la acción identificando objetivos, tareas y ensayos.

La teoría de la comunicación por otro lado está presente en lo relativo a las secuencias y a las interacciones de la conducta. El énfasis sobre la creencia parece indicar la creencia de un elemento cognitivo. La identificación de la influencia del entorno y particularmente de las organizaciones supone la adopción de ideas pertenecientes a la teoría de sistemas.

La practica centrada en la tarea

El propósito de la evaluación es identificar: los requisitos de la acción, los obstáculos de la misma, las restricciones inmodificables.

1. La especificación del problema, principio del acuerdo con el CS para abordar un corto periodo de evaluación. El contexto social del problema y la reacción de los demás también son importantes.

Proceso:

Identificar problemas potenciales,

Alcanzar un acuerdo provisional sobre la priorización de los problemas por el CS.

Definir cuáles son los problemas insolubles

Detectar problemas adicionales

Involucrar a otros si fuera necesario

Evaluar conjuntamente la razón de la búsqueda de ayuda

Obtener detalles del surgimiento del problema

Especificar el problema

Definir una línea base.

Definir los cambios deseados.

2. La fase de redacción del contrato: en esta fase el AS y el CS llagan a un acuerdo sobre las acciones a tomar.

Proceso:

Definir los problemas sobre los que se va a trabajar

Priorizar problemas

Definir resultados esperados

Diseñar primer bloque de tareas

Acordar número de visitas y duración del proceso.

3. La planificación de las tareas, se hace durante las sesiones con el CS, deber ser explicitas para que el cliente las haga fuera de las sesiones.

Tareas generales: fija las normas a seguir en el proceso de tratamiento.

Tareas operativas: definen lo que el cliente social hará.

Las tareas pueden ser unitarias o complejas; pueden ser individuales, reciprocas o compartidas.

Proceso

Identificación de las posibles tareas alternativas

Establecimiento de un acuerdo

Planificación de la implantación

Resumen de las tareas

4. La implantación de las tareas, en las sesiones se establece:

Un sistema de registro, detallar estrategias, acordar incentivos, ensayar habilidades, identificar el valor de la tarea, ensayar pertinentes habilidades, analizar los inconvenientes, planificar las tareas del AS que contribuirán al éxito.

Las tareas del asistente social podrían ser: trabajar con personas cercanas al CS para que lo ayuden en sus tareas, preparar incentivos para cuando se alcance el éxito, compartir las tareas con el cliente social. Revisar logros alcanzados con el CS, envió a otro organismo social si es necesario.

5. Fase de terminación: el AS y el CS:

Comparar situación inicial y ver logros, evaluar los cambios percibidos, planear futuro, establecer finalización concreta del proceso, envió a otro organismo para recibir ayuda adicional.

Tanto las circunstancias de utilización de cada modelo como la naturaleza de sus respectivos enfoques son diferentes:

Intervención en crisis

Centrado en la tarea

Es una acción clásica que consiste en interrumpir una serie de acontecimientos que provocan anomalías en el funcionamiento normal de las personas.

Está enfocado sobre categorías definidas de problemas.

Está basada en la psicología de la psicodinámica del ego, adicionalmente Karl Slaikeu en su libro Intervención en crisis menciona influencias de la teoría de sistemas en este modelo, lo cual se ampliara más adelante.

Rechaza cualquier base psicológica o sociológica que se pretenda ver en sus métodos, este modelo se deriva de la investigación pragmático que surgió como consecuencia de la insatisfacción que se produjo con el trabajo casuista psicodinámico a largo plazo en algunos organismos estadounidenses.

Dentro de trabajo social puede ser considerada como una técnica general para tratar los problemas de las personas.

La crisis es lo que los motiva a buscar ayuda en los organismos sociales.

Reid y Epstein plantean que este modelo trata un muestrario más amplio de problemas y le da importancia a la definición clara de los problemas –objetivo a resolver, de las tareas y los límites del tiempo.

Ambos tratan de mejorar la capacidad de la gente para enfrentarse a problemas de la vida

Utiliza tareas prácticas para facilitar el reajuste de la gente, aunque un esfuerzo importante es su respuesta emocional a la crisis y los cambios a largo plazo en su capacidad para manejar los problemas cotidianos.

Hace hincapié en el desarrollo de tareas prácticas que resolverán problemas específicos. Los problemas emocionales se alivian mediante la realización exitosa de las tareas

Posee una teoría sobre el origen de las dificultades de la vida

Se hace cargo de los problemas tal como llegan y trata de resolverlos pragmáticamente.

A pesar de las diferencias los trabajadores sociales han visto afinidades en ambos modelos debido al parecido que tienen como enfoques de tratamiento estructurado a corto plazo y a la utilidad que tiene la investigación dentro del trabajo centrado en la tarea, como guía practica para la implantación de la intervención en crisis.

Correlatoría Modelo de autoformación Intervención en crisis ICBF.

LOS EFECTOS DE LOS EVENTOS DE ACUERDO AL NIVEL DE AMENAZA Y LA DURACION DE LA MISMA.

Al analizar los efectos de la violencia familiar y política en las personas, y con la intención de ampliar la categoría de estrés que se ha vuelto aplicables a casi todos los eventos, Sluzki (1994), propuso un esquema de análisis y de clasificación de las reacciones ante eventos amenazantes con base en dos variables. Por un lado el nivel de amenaza, y por el otro , la duración de la experiencia, así diferenció seis tipos de reacciones posibles que surgen de la combinación entre el nivel o intensidad de la amenaza (bajo, medio, alto) y la frecuencia de la experiencia (abrupta o repetitiva).

El modelo propuesto por Sluzki es de gran utilidad pues como se ha querido señalar en este texto, es importante ampliar la comprensión de lo que puede ser una crisis. se incluye este esquema por su sencillez y el uso del mismo no excluye otros modos de clasificación que existen en los textos de frecuente consulta, es simplemente un modelo mas, sin duda útil, pero no excluyente. También es importante agregar a dicho modelo, las variables individuales, familiares y sociales que se relaciona con la vulnerabilidad frente a los eventos. Por ejemplo y pese, a lo arrasadores que resultan ciertos eventos naturales o de violencia humana en lo que tiene que ver con los vínculos sociales de solidaridad y confianza, no es lo mismo que esto ocurra en una sociedad en donde existiera previamente una marcada división socioeconómica, que en una sociedad más homogénea, solidaria e igualitaria.

Analicemos entonces con detalle la propuesta de Sluzki:








I

N

T

E

N

S

I

D

A

D



Disonancia Socialización

Cognoscitiva Cotidiana

Ataque o Fuga Lavado de cerebro

Experiencia Experiencia

Abrupta

Inundación Embotamiento

Parálisis Sumisión

FRECUENCIA

Alto Nivel

De Amenaza

De la combinación de las variables frecuentes e intensidad, surgen seis tipos de reacciones posibles, como se observa en el esquema anterior.

1.La disonancia cognoscitiva: se refiere al efecto de una intrusión inesperada acompañada de un nivel de amenaza leve. Se produce una disonancia en la medida en que ocurre lo cual se “sorprende” de lo que ocurre lo cual se traduce en pensamientos del tipo “¿Qué está pasando aquí?”, “!que raro!”, Y al mismo tiempo un sobresalto fisiológico.

2. El ataque o fuga: se produce cuando se presentan amenazas aisladas pero de mayor intensidad, en donde lo que ocurre es una reacción psico-fisiologica de alerta intensa. La persona de modo inmediato asume una posición defensiva u ofensiva, es decir, escapando de la situación, o bien pasando al ataque.

3. La inundación parálisis: se produce cuando se presentan situaciones impredecibles con un nivel de amenaza externo, que ponen en riesgo la vida o la integridad personal propios o de personas muy cercanas, en un contexto (y esto es imprescindible) en donde las reacciones de ataque o fuga no son posibles. El efecto inmediato de esto, como lo señala Sluzki, es que entra en colapso todo el estilo adaptativo previo del sujeto, produciéndose entonces una “inundación” de estímulos frente a las cuales no es posible responder de las maneras habituales.

4. La socialización cotidiana: según el esquema, se produce o en buena medida se realiza mediante situaciones repetitivas con un bajo nivel de amenaza, tal como ocurre por ejemplo cuando una madre acosa a sus hijos todos los días para que cumplan con sus tareas escolares u ordenen su habitación.

5.El lavado de cerebro: se produce en ambientes en los cuales se realizan amenazas y coerciones más serias, pero en donde no ocurren actos intensos, pues previamente se ha colocado a los individuos en condiciones de sumisión y control, logrando así obtener un nivel de conformidad mediante una opresión constante y sin salida.

6. El embotamiento / sumisión: se produce cuando la experiencia es extrema y reiterada, y lo que produce es embotamiento o “entumecimiento” psíquico. Este es el caso de las victimas de secuestros prolongados o de campos de concentración.

Como última consideración frene al modelo propuesto por Sluzki, es importante recordar lo que Pakman (2004), al hacer mención específica respecto al Trastorno por Estrés Postraumático, (TEPT). Cuestiona, con razón, el abuso que en los últimos dos decenios se ha hecho de esta categoría, pues al diagnosticar a los individuos como padecimiento un TEPT se eliminan los diagnósticos de las situaciones sociales que llevan a que se perpetué la emergencia, mantenimiento y multiplicación de la patología manifestada en lo individual. Con esto no se quiere sugerir que no sea importante la atención de las personas que presentan estas manifestaciones, sino que es necesario considerar siempre el trasfondo histórico, social, político y económico que las hacen posibles. Como lo dijera el mismo autor en otro texto (Pakman, 1999): “es imprescindible que los profesionales piensen globalmente mientras actúan localmente”.[4]

LOS TIEMPOS DE LA CRISIS, LOS TIEMPOS DE LAS INTERVENCIONES.

Las personas y los colectivos “hacen lo mejor que pueden”, para hacer frente a las situaciones de amenazantes que se les presentan, lo cual infiere en que en un momento dado, reaccionaran de la mejor manera posible dentro de sus opciones de respuesta.

Desde el profesional que este manejando el caso es fundamental respetar la privacidad de las personas y las familias y tener siempre en mente que cuando se interviene se debe actuar como un “invitado”, en la vida de los demás, noción que implica que el que interviene va a estar por poco tiempo, debe tratar de inmiscuirse lo menos posible y debe mantener las normas de cortesía y discreción que se esperan en la cultura respectiva.

En el campo de la intervención es importante considerar si estamos frente a:

  • Una crisis desencadenada por un evento claramente identificable y de ocurrencia reciente.
  • Una “ruptura” por la acumulación de “pequeños” eventos durante un periodo prolongado de tiempo, ó
  • La “emergencia” de una crisis desencadenada por un evento aparentemente trivial, pero que pone en evidencia un hecho traumático ocurrido tiempo atrás y que estaba “silenciado”.

Pese a las especificadas en el manejo de estos tres tipos de situaciones, la literatura señala una serie de pautas generales para el manejo de las crisis:

Ø Es fundamental proporcionar a la (s) personas (s) en crisis en un ámbito seguro.

Ø Deben respetarse y considerarse las diferencias de género, individuales, las que determina el momento del ciclo vital y las culturales, en la manera de afrontar la situación.

Ø Es imprescindible evitar trivializar o banalizar la situación.

Ø Es importante recordar que las personas en crisis son sugestionables y que eso puede ser usado en su favor o en su contra.

Ø Siempre que sea posible, es útil mantener una actitud esperanzada y que ofrezca la certeza de un alivio.

Ø En principio, se asume que el sujeto en crisis es una persona normal sometida a circunstancias anormales y fuertemente perturbadoras.

Ø Es esencial usar los recursos personales, familiares y sociales de los afectados para la solución de la crisis.

Ø Es importante evitar usar los esquemas clínicos que puedan ser muy útiles para la definición de la situación crítica, y sus consecuencias pero que no lo son tanto para la intervención. Un sujeto en crisis esta respondiendo a las circunstancias y no a una patología.

Adema de esto es importante que el profesional tenga claridad respecto a:

v Qué puede hacer y que no puede hacer. Nada más perjudicial que prometer cosas que no se pueden cumplir.

v Cuales son los recursos instituciones o las fuentes de remisión de los casos.

v Al reconocimiento de que es el representante de la “ayuda”, y por tanto de que lo que haga, así sea puntual y momentáneo, abrirá o cerrara las puertas para que la persona busque o no mas ayuda.

CRISIS POR UN EVENTO CLARAMENTE IDENTIFICABLE Y DE OCURRENCIA RECIENTE.

Las guías de intervención en crisis de los últimos 50 años se enfocan principalmente en este tipo de situaciones, en las que el evento perturbadora sido claramente identificado, se busca actuar lo más rápida y eficazmente posible, con el objetivo de aminorar los daños y prevenir posibles secuelas.

Dentro de los parámetros técnicos clásicos se suelen dividir la o las entrevista en crisis en tres momentos: (1) contacto inicial y evaluación del problema, (2) búsqueda de soluciones y acciones y (3) seguimiento. A continuación presentamos un esquema en el cual se muestra lo que se recomienda y lo que no se recomienda hacer para cada etapa.

Qué hacer

Qué no hacer

Contacto inicial y evaluación del problema

- Tener en cuenta la particularidad de cada caso.

- Escuchar siempre, cuidadosamente.

- Validar sentimientos y hechos.

- Comunicar explícitamente la aceptación.

- Formular preguntas abiertas.

- Pedirle a la persona que sea concreta y especifica.

- Evaluar el riesgo vital.

-Inferir o suponer “hechos” o “cuadros” clínicos.

-Contar la propia historia.

-Ignorar hechos o descalificar sentimientos.

-Juzgar o tomar partido.

-Exigir respuestas asertivas “contésteme si o no”.

-Permitir divagaciones o generalizaciones, no asumir la responsabilidad o el papel dentro de la situación: “es que como a una…”, “esa gente siempre…”

-Ignorar signos de peligro “a fin de cuentas la solución está en la mano de uno”; “si tuviera el valor había acabado de raíz con esto hace rato….”

Búsqueda de soluciones y acciones

-Estimular la inspiración del sujeto.

-Abordar directamente los obstáculos.

-Establecer prioridades.

-Tomar una medida o decisión por vez.

-Establecer objetivos específicos a corto plazo.

-Confrontar y ser directivo cuando sea necesario.

-Realizar un mapeo sobre personas que pueden ser de ayuda, o bien de obstáculo en la relación de la situación.

-Permitir las expectativas irreales, culpabilizantes o mesiánicas.

-Dejar obstáculos inexplorados.

-Tolerar la mezcla de necesidades.

-Resolverlo todo ahora.

-Decisiones obligatorias a largo plazo.

-Ser tímido.

-No asumir responsabilidades cuando sea necesario.

-Presuponer la solución.

Seguimiento

Fijar nuevo encuentro en lugar y fecha precisa y con personas determinada, ojalá por escrito.

Dejar sin precisarlo.

Conclusiones

Desde su aparición a principios de siglo, la intervención profesional del Trabajo Social ha ido desarrollando y aplicando un conjunto de modelos para afrontar los problemas sociales en su dimensión individual-familiar o en su dimensión colectiva. Más que de una agria cootroversia de "escuelas", se trata de planteamientos sincréticos, inclusores; cada nuevo enfoque se hace eco de los anteriores -y coetáneos, y aunque han ido variando las teorías de referencia o se han ido ideando nuevas estrategias de intervención, permanecen maneras de ver y de actuar, forjadoras de la identidad del campo de la intervención social.

Cierto es que el énfasis se ha ido desplazando de lo intrapersonal a lo interpersonal y socio-institucional; pero también esto hay que matizarlo: desde el inicio, y por muy "terapeútico" que fuese un cierto trabajo social, siempre se comprendió el carácter "social" del problema a abordar. De todos modos, parece existir, a escala internacional, una tendencia general a distanciarse de los modelos basados en la teoría psicoanalítica para centrarse en otros modelos que integran una pluralidad de sistemas teóricos y de experiencias prácticas. Los primeros modelos ponen el acento en la terapia de la persona y la solución de problemas: están orientados hacia la acción preventiva por medio de la intervención en momentos de crisis, hacia problemas bien delimitados a través de la modificación de conducta y el corto plazo planificado centrado en la tarea. En este último caso, la característica sobresaliente consiste en la adopción del marco de referencia del cliente/usuario para determinar el problema y los objetivos. Un marco de referencia nuevo, que utiliza la teoría de los sistemas y las teorías de la comunicación, permite abordar, en otra dimensión la terapia de pareja y de familia; permite asimismo aproximarse al Trabajo Social de un modo distinto, matizar las nociones de causalidad y de responsabilidad, al fijar la atención sobre el proceso, sobre el equilibrio del sistema y el mantenimiento de su estabilidad. El enfoque de socialización demuestra finalmente la necesidad de replantear la práctica del Trabajo Social ante la emergencia de nuevos problemas sociales en un mundo cambiante.
La pluralidad de modelos tan didácticamente expuestos aquí -los casos prácticos son frecuentes en el texto- nos da un panorama bastante amplio de la dimensión individual-familiar del Trabajo Social. Despliega ante los profesionales de lo social un amplio abanico de funciones y roles: informante, defensor, mediador, orientador o educador; proporcionar modelos de conducta; intervenir en el sistema familiar; mostrar nuevas formas de actuación etcétera.

Este libro, de gran utilidad como manual orientador en la formación inicial supone a su vez un acicate para profundizar en la autonomía y el desarrollo de la profesión del Trabajo Social en los Servicios Sociales Personales y en otros sistemas de bienestar, en nuestro país, distanciándola de planteamientos puramente gestores, asistenciales y subalternos, en el fondo desprofesionalizadores.



[1]Slaikeu. Karl A. Intervención en Crisis. Manual moderno pág. 6. 1988.

[2] Ibíd.

[3][3] Ibíd. pág. 28

[4] SANTACRUZ Oleas. Hernan. ICBF. Asociación Colombiana de Psiquiatría. INTERVENCION EN CRISIS. Manual de Autoformación. Mayo. 2005. Pag 15.